DÓNDE PUEDEN
PRODUCIRSE EXPLOSIONES DE POLVO
En general, allí
donde se acumule polvo de cualquier clase, habrá que preguntarse si existe
riesgo de explosión, para adoptar las medidas que impidan que ésta llegue a
producirse, o medidas tendientes a limitar sus efectos.
Algunos ejemplos
de operaciones industriales en las que pueden producirse incendios o
explosiones debidos a materiales que producen polvos son los siguientes:
- Moler y secar carbón.
- Cargar silos de polvo de carbón
- Succionar y transportar polvos de madera en las instalaciones de filtrado y separación.
- Cargar y ensilar cereales.
- Moler, mezclar y transportar, mecánicamente, productos orgánicos como cereales, forraje, azúcar, plásticos, colorante, productos farmacéuticos, etc.
- Rectificar metales ligeros y sus aleaciones.
- Fabricación y manipulación de polvos metálicos.
QUÉ SON “MATERIAS
SÓLIDAS COMBUSTIBLES”
Son materiales que
pueden reaccionar con el oxígeno liberando calor. Esta definición incluye no
sólo muchos productos naturales o sintéticos de uso cotidiano, por ejemplo
madera, carbón, cereales, materias plásticas, etc., sino también muchos metales
que se presentan finalmente divididos, como las virutas finas de acero.
QUÉ ES EL POLVO
El término “polvo”
hace referencia a las materias sólidas divididas en partículas de diámetro
inferior a 0,5 mm. En unos casos, el polvo es fabricado intencionalmente para
una aplicación concreta, por ejemplo las harinas, el cemento, etc., pero en
otros, el polvo se presenta de forma indeseada; tal es el caso del polvo que se
produce durante el transporte de materiales sueltos con partículas gruesas, por
ejemplo cereales. Otro caso de polvo indeseado es el que se produce durante el
tratamiento o transformación de materiales sólidos con partículas gruesas, como
aserrín de madera, polvo de amolado, etc.. Hay que prestar igualmente una
especial atención a las pequeñas cantidades de polvo presentes en los
materiales más gruesos.
QUÉ ES UNA
EXPLOSIÓN DE POLVO
Cuando una capa de
polvo entra en ignición, se produce un incendio. Cuando lo que entra en
ignición es una nube de polvo, puede producirse una explosión que, al contrario
que en el incendio, va acompañada de un aumento de la presión (generalmente muy
rápido) y de una brutal liberación de calor.
Esta reacción
excepcionalmente violenta, caracteriza a los peligros inherentes a una
explosión de polvo.
CUÁNDO SE PUEDE
PRODUCIR UNA EXPLOSIÓN DE POLVO
Una explosión de
polvo puede producirse si se dan las siguientes condiciones simultáneamente en
un mismo lugar:
Existencia de una
sustancia sólida combustible finamente dividida, dispersa en el aire, bajo la
forma de nube de polvo en una relación de concentración bien definida.
Presencia de una
cantidad de oxígeno suficiente para asegurar la combustión.
Presencia de una
fuente de ignición eficaz.
CUÁLES SON LAS
CONCENTRACIONES PELIGROSAS
Por regla general
las explosiones de polvo pueden producirse a partir de concentraciones de 20
gramos de sustancia por metro cúbico de aire. Tales concentraciones son
frecuentes en el interior los equipos e instalaciones, como molinos,
mezcladoras, etc. En el ambiente de talleres y plantas pueden también
alcanzarse, como consecuencia de una falta de estanqueidad de los equipos en
los que se procesan sustancias capaces de general nubes de polvo.
También pueden
alcanzarse estas concentraciones en el ambiente, durante los trabajos de
mecanizado en los que se generan virutas muy finas y cuando, ocasionalmente,
los depósitos de polvo son arrastrados por tuberías, formando nubes. Las
explosiones de polvo son posibles
incluso con concentraciones de algunos miligramos de sustancia por metro cúbico
de aire.
CUÁLES SON LAS CANTIDADES
DE OXÍGENO SUFICIENTES
La concentración
normal de oxígeno en el aire debe considerarse como suficiente. Sin embargo,
algunos polvos “explotan” a concentraciones de oxígeno todavía más débiles. Las
explosiones más violentas se producen a concentraciones de oxígeno superiores a
las del aire.
MEDIDAS TÉCNICAS DE
PREVENCIÓN
Para evitar las
explosiones de polvo y/o limitar sus efectos pueden adoptarse diversas medidas
técnicas y/o constructivas de prevención. Exponemos a continuación las medidas preventivas
en las que es fundamental la participación del trabajador.
Eliminar las
fuentes de ignición: Las explosiones de polvo pueden evitarse si se logra eliminar
las fuentes de ignición que, por sus propiedades (energía, temperatura, etc.), están
en condiciones de inflamar una mezcla de polvo y aire.
Podríamos dividir
las fuentes de ignición en las siguientes categorías:
- Fuentes de ignición habituales o evidentes, como equipos de soldadura, rectificadores, acto de fumar y colillas de cigarrillos.
- Fuentes de ignición funcionales, como superficies calientes, chispas eléctricas y electrostáticas.
- Fuentes de ignición accidentales, como presencia de cuerpos extraños en molinos, focos de incendio sin llama.
MEDIDAS
ORGNIZATIVAS
Entre numerosas posibilidades,
las siguientes medidas organizativas presentan un interés particular en la técnica
industrial:
Limpieza de las
instalaciones y sus alrededores: Se limpiarán no sólo a intervalos regulares,
sino especialmente durante y después de cada operación que entrañe una
importante formación de polvo, ya que sólo una capa de un milímetro es
suficiente para formar una mezcla explosiva.
Vigilancia técnica
de seguridad y mantenimiento: Se prestará especial importancia a los equipos técnicos
de seguridad, como por ejemplo las válvulas de explosión, los sensores, los
registros de cierre rápido, así como las instalaciones y órganos susceptibles de
actuar como fuentes de ignición (cojinetes, correas, etc.).
Señalización y
delimitación de las zonas de peligro: Deben señalizarse, y a poder ser acordonarse,
las zonas de peligro, como por ejemplo las bases de los silos o las zonas
dotadas de orificios de descarga de explosión.
Elaboración de
instrucciones de servicio: Deben estar claramente establecidas las
responsabilidades en cuanto a la aplicación de medidas, regulándose el
comportamiento del personal, tanto en régimen de explotación normal como en
caso de avería en la instalación.
Instrucción
regular del personal: El personal debe ser informado, a intervalos regulares,
de los posibles peligros, e instruido en cuanto a la conducta correcta a
seguir.
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